Ante la reciente aprobación de la Reforma Constitucional que
reconoce jurídicamente al Pueblo Afromexicano, quienes hemos venido caminando
por un proceso disciplinado de más de un año y que en ese andar, este proceso
se ha nutrido de las voces de la gente negra a través de Consultas y consensos,
vemos con tristeza que dicha iniciativa, hoy ya Reforma a la Constitución
Política del Estado Libre y Soberano de Oaxaca, no es la legislación que el pueblo
requiere y voy a sustentar dicho planteamiento, aun a sabiendas de que muy
pronto será denostada tanto la persona como la opinión expresada, como se hizo
recientemente con el posicionamiento externado al respecto del coordinador de
SOCPINDA AC, Isidro Ramírez López en el blog: Pinodebate.
Esta Reforma no es la que el Pueblo Negro Afromexicano
requiere porque en primer término no es
producto de una consulta, no expresa el sentir, los deseos, los reclamos y las
esperanzas de un pueblo que hoy en día siguen negado y sigue ausente de las
políticas públicas.
No lo es porque no basta con el enunciamiento de aparecer en
la Constitución si no hay la posibilidad de establecer con claridad el trayecto
que permita el pleno goce de nuestros derechos.
No lo es porque nace porque nace al amparo de un escritorio
alejado de nuestras realidades y contextos.
Al menos, que esa es la ley que los legisladores quieren
para el Pueblo y no la que el pueblo negro requiere.
Quiero expresar como parte del Comité técnico y como parte
de la asociación civil AFRICA, que respaldamos y seguiremos acompañando el
trabajo que la Secretaría de Asuntos
Indígenas ha realizado como producto de diversas manifestaciones y foros de la sociedad
civil.
Finalmente, una reforma discutida y cabildeada por políticos
y sin la participación de los que serán legislados, no augura buena esperanza.
A continuación comparto algunos puntos que se han recogido de los foros de consulta y reuniones sobre el tema:
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